Pregunta: “�Cu�l es el modelo b�blico del liderazgo de la iglesia?”

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topreadz.com/Espanol Pregunta: “�Cu�l es el modelo b�blico del liderazgo de la iglesia?” Respuesta: Hay un modelo distinto para el liderazgo de la iglesia en el Nuevo Testamento, aunque este modelo pareciera que se asume en lugar de ser recomendado espec�ficamente. El Nuevo Testamento menciona dos posiciones oficiales en la iglesia: di�conos y ancianos (tambi�n llamados…

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Pregunta: “�Cu�l es el modelo b�blico del liderazgo de la iglesia?”

Respuesta:
Hay un modelo distinto para el liderazgo de la iglesia en el Nuevo Testamento, aunque este modelo pareciera que se asume en lugar de ser recomendado espec�ficamente. El Nuevo Testamento menciona dos posiciones oficiales en la iglesia: di�conos y ancianos (tambi�n llamados pastores o supervisores).

Las palabras anciano (a veces traducido “presb�tero”), pastor (que puede ser traducido como “pastor”) y supervisor (a veces traducido como “obispo”) se usan indistintamente en el Nuevo Testamento. Aunque estos t�rminos con frecuencia significan cosas diferentes entre las diversas iglesias de hoy en d�a, el Nuevo Testamento al parecer indica un oficio, que fue ocupado por varios hombres piadosos dentro de cada iglesia. Los siguientes vers�culos ilustran c�mo los t�rminos se cruzan y se usan indistintamente:

En Hechos 20:17-35, Pablo est� hablando a los l�deres de la iglesia de �feso. Se les llama “ancianos” en el vers�culo 17. Luego en el vers�culo 28 dice, “Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el reba�o en que el Esp�ritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Se�or”. Aqu� los ancianos son llamados “obispos” y sus deberes pastorales est�n impl�citos ya que a la iglesia se le llama “reba�o”.

En Tito 1:5-9, Pablo da las calificaciones de los ancianos (vers�culo 5) y dice que estas calificaciones son necesarias porque “es necesario que el obispo sea irreprensible” (vers�culo 7). En 1 Timoteo 3:1-7, Pablo da las calificaciones para los obispos, que son esencialmente las mismas que las calificaciones para los ancianos en Tito. En 1 Pedro 5:1-4, Pedro les dice a los ancianos que “pastoreen el reba�o de Dios”. De estos pasajes, vemos que el oficio de anciano/pastor/supervisor-obispo es uno. Aquellos que ocupan este cargo deben dirigir, ense�ar y cuidar la iglesia de la misma manera que un pastor.

Adem�s, vemos que cada iglesia tiene ancianos (plural). Se supone que los ancianos deben gobernar y ense�ar (1 Timoteo 5:17). El modelo b�blico es que un grupo de hombres (y los ancianos siempre son hombres) es responsable del liderazgo espiritual y el ministerio de la iglesia. No se menciona una iglesia que tenga un solo anciano/pastor que est� a cargo de todo, ni tampoco se menciona el gobierno congregacional (aunque la congregaci�n juega un papel).

Aunque los ancianos son responsables de ense�ar y dirigir el reba�o, a�n queda mucho por hacer a nivel f�sico. El oficio del di�cono se enfoca en las necesidades materiales de la iglesia. En Hechos 6, la iglesia de Jerusal�n satisfac�a las necesidades materiales de muchas personas de la iglesia por medio de la distribuci�n de alimentos. Algunas de las viudas acudieron a los ap�stoles porque no recib�an lo que necesitaban. Los ap�stoles respondieron: “No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, para servir a las mesas” (Hechos 6:2). Para aliviar a los ap�stoles, se le dijo al pueblo “Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Esp�ritu Santo y de sabidur�a, a quienes encarguemos de este trabajo. Y nosotros persistiremos en la oraci�n y en el ministerio de la palabra. Pero nos dedicaremos a la oraci�n y al ministerio de la palabra” (vers�culos Hechos 6:3-4). Aunque los hombres escogidos aqu� no se llaman di�conos, la mayor�a de los eruditos b�blicos los ven como los primeros di�conos, o al menos como un prototipo del cargo. La palabra di�cono simplemente significa “siervo”. Los di�conos son nombrados oficiales de la iglesia que atienden las necesidades m�s f�sicas de la iglesia, aliviando a los ancianos para atender un ministerio m�s espiritual. Los di�conos deben estar espiritualmente preparados, y las cualidades de los di�conos se dan en 1 Timoteo 3:8-13.

En resumen, los ancianos dirigen y los di�conos sirven. Estas categor�as no son mutuamente excluyentes. Los ancianos sirven a su pueblo dirigiendo, ense�ando, orando, aconsejando, etc.; y los di�conos pueden dirigir a otros en el servicio. De hecho, los di�conos pueden ser los l�deres de los equipos de servicio dentro de la iglesia. Sin embargo, existe una distinci�n b�sica entre los responsables del liderazgo espiritual de la iglesia y los responsables del servicio.

Entonces, �d�nde encaja la congregaci�n en el modelo de liderazgo de la iglesia? En Hechos 6, fue la congregaci�n la que eligi� a los di�conos; por lo tanto, muchas iglesias de hoy har�n que la congregaci�n designe y ratifique a los di�conos de la iglesia. Y, por supuesto, los miembros de la congregaci�n ser�n los principales ministros y evangelistas que alcancen a un mundo perdido. La idea de que la congregaci�n contrate ministros profesionales para hacer el trabajo de la iglesia no es b�blica.

Puede haber algunas variaciones locales en el liderazgo de la iglesia porque esto es s�lo un modelo b�sico; cada detalle no est� descrito en las Escrituras. El modelo b�sico que se encuentra en el Nuevo Testamento es que toda iglesia debe tener una pluralidad de ancianos piadosos (hombres) que sean responsables de dirigir y ense�ar a la iglesia y di�conos piadosos que sean responsables de facilitar los aspectos materiales del ministerio de la iglesia. Una pluralidad de ancianos protege a la iglesia de las debilidades y posibles excesos que un solo anciano podr�a ocasionar. Mientras se siga este modelo b�sico, la iglesia funciona seg�n el modelo b�blico. Tener un �nico pastor que controle la iglesia no es el modelo b�blico, y tampoco lo es un acuerdo en el que el pastor trabaje para los di�conos que realmente dirigen la iglesia. La congregaci�n debe seguir la direcci�n de los pastores que siguen a Cristo. En su sabidur�a, los ancianos pueden pedir la aprobaci�n de la congregaci�n para decisiones importantes, pero la congregaci�n no debe ser la autoridad final. La responsabilidad recae en los ancianos/pastores/supervisores, los cuales responden a Cristo.

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