Pregunta: “�Dice la Biblia algo sobre la existencia de los agujeros negros?”

Respuesta:

topreadz.com/Espanol

Pregunta: “�Dice la Biblia algo sobre la existencia de los agujeros negros?”

Respuesta:
Los agujeros negros, simplemente, no son un tema del que la Biblia tenga que hablar. La Biblia est� destinada a comunicar un tema principal por encima de todos los dem�s: la forma en que la humanidad puede reconciliarse con Dios. Por esa raz�n, muchos temas del universo no se tratan en las Escrituras. Esto no significa que la Biblia contradiga esas ideas. Tampoco significa que la Biblia asuma algo falso sobre ellas. S�lo significa que esos conceptos no tienen importancia en el libro. El manual de instrucciones de un auto, por ejemplo, explicar� c�mo revisar el aceite del motor, pero no tratar� la historia de Henry Ford.

Los agujeros negros, seg�n la teor�a moderna, son objetos interesantes pero que siguen las mismas leyes de la f�sica que otros cuerpos. Todos los planetas, estrellas, asteroides, etc., ejercen gravedad sobre su entorno. Mientras m�s cerca se est� del objeto, m�s fuerte ser� esa atracci�n y m�s dif�cil ser� alejarse. Superar la atracci�n de la gravedad de la Tierra desde el nivel del suelo necesita una enorme cantidad de fuerza. Aunque la atracci�n de la gravedad es m�s d�bil mientras m�s se aleja un cohete del planeta, un cohete sigue vi�ndose afectado por la gravedad de la Tierra, aunque se encuentre en �rbita.

Cuando una nave espacial viaja por el espacio, tiene que mantener una determinada distancia con los objetos, bas�ndose en su atracci�n por la gravedad. Los objetos con mayor masa tienen campos gravitacionales m�s fuertes. Cuanto m�s cerca est�n dos objetos, m�s fuerte ser� la atracci�n de la gravedad. A no ser que los propulsores de la nave espacial sean muy potentes, siempre habr� una cierta distancia en la que la nave no podr� liberarse de un objeto grande, tan grande como una estrella o un planeta. Una vez que la nave espacial se acerca demasiado, puede dar vueltas o acercarse, pero nunca podr� alejarse sin realizar un gran esfuerzo de empuje.

Mientras m�s potentes sean los propulsores de la nave, m�s cerca puede estar�m�s gravedad puede resistir. La caracter�stica que define a un agujero negro es simplemente que es tan enorme�tiene tanta fuerza gravitatoria�que los objetos que se encuentran a cierta distancia necesitan una energ�a ilimitada para superar su atracci�n. La gravedad de un agujero negro es tan poderosa que, una vez que un objeto est� lo suficientemente cerca, no hay forma posible de escapar de su atracci�n. Este punto sin retorno se llama “horizonte de sucesos”.

Por eso estos objetos se llaman agujeros “negros”: su materia est� tan densamente concentrada que la atracci�n de la gravedad atrae todo, incluida la luz, hacia s� misma. El horizonte de sucesos no es la superficie f�sica del agujero negro, sino la distancia de la que nada�ni luz, ni energ�a, ni informaci�n�puede recuperarse. A diferencia de lo que se presenta en la ciencia ficci�n, los agujeros negros no son portales a otros universos, aspiradoras c�smicas o depredadores intergal�cticos ambulantes.

Nada en la Biblia indica o contradice expl�citamente la idea de un agujero negro. Las propiedades f�sicas de los agujeros negros apoyan la idea de que el universo requiere de un nivel de ajuste preciso para soportar la vida. La Biblia a veces describe la desgracia como una ca�da en la oscuridad�una descripci�n resumida de lo que le ocurre a la materia que se acerca a un agujero negro (v�ase Ezequiel 28:8). Ideas como la oscuridad absoluta (Judas 1:13), la destrucci�n total (2 Tesalonicenses 1:9) y la aniquilaci�n de la materia (2 Pedro 3:10-12) aparecen en las Escrituras. Sin embargo, la coincidencia no es lo mismo que la conexi�n. La Biblia no presenta estas ideas como si estuvieran relacionadas de alguna manera con los objetos reales f�sicos que llamamos agujeros negros.

Por �ltimo, los agujeros negros son s�lo otro aspecto fascinante del universo creado por Dios. Los f�sicos se preguntan qu� influencia pueden tener los agujeros negros en la circulaci�n de las galaxias o en el equilibrio de la energ�a en el universo. La Biblia, sin embargo, no dice nada particular sobre ellos, ya que esa informaci�n no tiene importancia para nuestra salvaci�n eterna o nuestro crecimiento espiritual.

©